Justicia colombiana emite la condena más alta en caso de ataque con ácido
Tras
dos años y medio del ataque perpetrado con ácido sulfúrico en contra de Natalia
Ponce de León, la justicia colombiana decidió condenar por tentativa de
homicidio agravado a Jonathan Vega Chávez, su agresor, quien tendrá que purgar
una pena de 21 años, 10 meses y 15 días de prisión. Hasta ahora, es la
sentencia más alta que se ha emitido en cuanto a este tipo de agresiones.
La
decisión fue tomada el jueves 8 de septiembre por Jarveir
de Jesús Rodríguez, juez 37 de conocimiento en Bogotá, quien lo halló responsable de la agresión, pese a que su
defensa intentó demostrar que tenía trastornos psiquiátricos (esquizofrenia y
trastorno bipolar). Según Rodríguez, Vega actuó conscientemente y de manera
premeditada en el ataque, por lo cual deberá pagar su condena en un centro
carcelario del país.
“No me parece que las sanciones de cárcel sean las que
tengamos que abrazar y acoger en este país, porque todos sabemos que la cárcel
no cambia a la gente, pero es interesante que exista una sanción y que sea muy
fuerte, tal vez de las más fuertes que pueda haber”, señaló Ana Patricia
Aristizábal Gómez, abogada y asesora en Derechos Humanos de la Personería de
Medellín.
La agresión en contra de Natalia, una joven de 33 años, fue el
27 de marzo de 2014 en el norte de Bogotá. Jonathan le arrojó un litro de ácido
sulfúrico en el rostro y el cuerpo, ocasionándole graves quemaduras y daños que
casi le causan la muerte.
“Este tipo de ataques es una de las formas de violencia más
aberrante contra las mujeres. Además que constituye una violencia de género,
porque no lo hacen contra los hombres. Los agresores quieren es destruir su
belleza y vanidad. Es un asunto que si se profundiza se encuentra como parte de
todo este patriarcado espantoso que nos ha tocado vivir a estas generaciones”,
manifestó Aristizábal Gómez.
Natalia cubrió su rostro con una máscara especial durante
varios meses. Actualmente, luce sin ella. Hasta la fecha se ha sometido a más
de 20 cirugías, y aún está a la espera de más procedimientos para tratar de
aminorar las lesiones de su piel. Ha liderado campañas en contra de los ataques
con ácido en Colombia. Creó una fundación, con la cual busca promover y
proteger los derechos de las víctimas de estas agresiones y logró promover en
el Congreso de la República una Ley que lleva su nombre y fue sancionada el 18
de enero de este año por el presidente de la República, Juan Manuel Santos.
“Lamentablemente en esta sociedad en la que vivimos, nuestro
derecho no consagra otro castigo más fuerte que la cárcel. Escuché en los
medios de comunicación que Natalia Ponce de León se siente reparada con la
sanción que le están dando a Jonathan Vega. Hay que aprender a respetar los
derechos de los otros. Que nadie violente a otra persona, mucho menos de esta
manera”, concluyó Ana Patricia.